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martes, 5 de marzo de 2019

El Decrecimiento



   En este tercer trimestre, estamos tratando los problemas socioeconómicos más preocupantes. He elaborado una imagen interactiva en la que recopilo los problemas medioambientales más importantes, en los cuales debemos actuar cuanto antes.



   Ante estos problemas es necesario adaptar soluciones urgentes, muy urgentes y eficaces.
La solución definitiva es algo muy subjetivo que depende del grado del conocimiento que se tenga de este tema, de los valores de una persona, de las prioridades, dela conciencia que se tenga, del juicio, de la mentalidad política, incluso de la manera de verlo.


¿Por qué debemos establecer soluciones?

El crecimiento cero y el decrecimiento: 
Para los autores del Club de Roma, la idea va más allá del crecimiento cero y está anticipando las propuestas del decrecimiento. Su análisis planteó, la necesidad de crear un cambio de orientación que dice:
Creemos que la toma de conciencia de las limitaciones físicas del medio ambiente mundial y las trágicas consecuencias de una explotación irracional de los recursos, es necesaria para que emerjan nuevos modos de pensar que conducirán a una revisión fundamental, a la vez del comportamiento de los hombres, y dela estructura de la sociedad actual en su conjunto.
   Esto es lo que llamamos la descolonización de los imaginarios. El presidente de la Comisión Europea, Sico Mansholt, intentó llevar por este camino a Europa.
En bruselas terminaron por aceptar que el crecimiento fuera "más humano y equilibrado."
   Sin embargo, para los países cuya huella ecológica representa de 3-10 planetas (Europa, Estados Unidos) , el crecimiento cero no es suficiente.
El objetivo no es reggatear un punto o dos más o menos del PIB, sino que se trata de romper con la religión del crecimiento y de la economía.
   Pero nuestra sociedad es la de consumo, las actividades destruyen el planeta. Actuamos pensando en nosotros mismos, buscando la mayor comodidad, rápidez, mínimo esfuerzo.
   Es cierto que hemos aumentando nuestra calidad de vida, pero quizá en exceso...
   Estamos excluyendo las consecuencias que está sufriendo el plantea por nuestra culpa. Nos estamos cargando el planeta, le estamos destruyendo acción a acción.
   Si no cambiamos la metodología de producción industrial, de nuestra forma de consumo... Quizá nos arrepentiremos más tarde, o incluso demasiado tarde.  (consumimos como si nos sobraran los recursos, como si fueran infinitos, como si no hubiéramos modificado nada en la sociedad)
   Mientras los países más desarrollados son los que mayor huella ecológica tienen, los países y territorios que sufren constantes hambrunas, catástrofes naturales y guerras son los que menos contribuyen a agravar la huella.
   Actuamos como si tuviéramos planetas infinitos, como si una vez que hemos aniquilado nuestra propia vida, pudiéramos habitar en otro, para seguir creciendo y destruir otro, y así sucesivamente.
   Al ritmo que consumimos, ¿te haces una idea de los planetas que necesitaríamos tan sólo por seguir creciendo?  Hasta la fecha de hoy, según el informe Planeta Vivo WWF, vivimos como si tuviésemos 1,7 planetas Tierra a nuestra disposición. Para el año 2030 se prevé que esa necesidad aumentará a dos planetas enteros.
   Es un tema que nos debería de preocupar a todos y cada uno de los habitantes de la tierra. Juntos podemos parar de crecer, crecemos sin parar, debemos cambiar hasta la obtención de energías, necesitamos procesos limpios, cuidadosos y respetuosos en el medio ambiente.

Por lo tanto, si el consumo es más rápido que la regeneración de los recursos utilizados se podría desembocar en pocos años en el agotamiento del Planeta.
   Tiene que ser un cambio muy notable para compensar todo lo que la tecnología, y por tanto, nosotros, hemos empeorado a nivel ecológico.
   Las solución más populares es La Economía Circular
Puede que ya sea demasiado tarde como para quedarnos en simplemente reciclar o reutilizar.
   Otra de ellas es la propuesta sostenible de Gunter Pauli: La Economía Azul
¿Has oído hablar de ella?


LA ECONOMÍA AZUL:
   Propone copiar a la naturaleza para lograr ser más eficiencia. Un centenar de proyectos empresariales que abarcan diversos sectores de la economía demuestran que es posible un modelo empresarial sostenible y muy competitivo con beneficios medioambientales, financieros y sociales.Ya hemos generado suficientes residuos, ¿no crees?
Es hora de dejar de crecer...





   La economía azul sigue consumiendo, aunque con menos residuos.
Sin embargo, ya hemos generado suficientes residuos, ¿no crees?

   Es hora de dejar de crecer... Creo que la solución más efectiva sería parar de hacerlo, o cómo mínimo disminuir el ritmo considerablemente.
Para ello ha surgido El Decrecimiento



INICIOS DEL DECRECIMIENTO:

   El Decrecimiento es una gestión económica y una sociedad en las que el objetivo a alcanzar es el bienestar de todos y todas, respetando el fundamento ecológico de la vida. Es necesario no sólo un cambio fundamental de nuestro estilo de vida, sino también una transformación cultural integral.
Tras más de 20 años de crecimiento económico extraordinario, a finales de los años 60, empieza a surgir en la sociedad lo que sería una conciencia ecológica global que cuestiona la sociedad de consumo. En 1968, salieron a la luz unas protestas sociales, siendo así los primeros movimientos ecologistas que también llevaron a una nueva idea política, inclinada al cambio, a la acción.
   Ese mismo año una treintena de científicos y economistas de todo el mundo se reunieron en Roma para analizar el impacto de las actividades humanas en la biosfera. Nació así el Club de Roma.  

   Un año más tarde el profesor del Instituto Tecnológico de Massachussets, Dennis Meadows,
inicia una investigación global sobre el futuro del planeta. Meadows reúne a un equipo de 17 investigadores que, utilizando un modelo de dinámica desarrollado con simuladores para llevar a cabo dicho estudio. Los resultados se publican en el histórico informe "Los Límites del Crecimiento".

 
    Su conclusión principal fue que en cien años se alcanzarían los límites absolutos de crecimiento de mantenerse los incrementos de población, industrialización, contaminación, producción de alimentos y explotación de los recursos naturales que había en ese momento.

   Aunque recibió críticas por parte de los economistas ortodoxos, este informe es el fundamento de los movimientos ecologistas, agregando el tema de los límites del crecimiento en el debate político.
Tabién nació la Economía ecológica, con dos postulados. 
  •    Por un lado, el matemático y economista Nicholas Georgescu-Roegen funda la bioeconomía, una disciplina que asocia las leyes físicas de la termodinámica a la actividad económica. Pensemos por ejemplo en la combustión de un pedazo de carbón: la energía liberada se transformará en calor, que aprovecharemos para calentarnos (y luego en humo y en cenizas.) Aunque la energía total del sistema se conserve en estos tres componentes, tras la combustión habrá aumentado la entropía del sistema, es decir, habrá disminuido para siempre la energía disponible en él.  Quemar un trozo de carbón cambia un recurso natural de baja entropía por un residuo de alta entropía, mucho menos capaz de realizar un trabajo. Georgescu-Roegen determinó que el crecimiento industrial no se integra en la economía de la naturaleza, sino que sobrepasa los límites de la biosfera a escala temporal humana, constatando los límites físicos y económicos del progreso técnico. 
   El tiempo le ha dado la razón, aunque algunos economistas no estén de acuerdo, apoyándose con frecuencia en el segundo enfoque de la visión ecológica de la economía.
  •    Este sería el enfoque del ecologista Howard Thomas Odum, uno de los padres de la eco-tecnología. Para Odum, Georgescu-Roegen se equivocaba, ya que el sol asegura el reciclaje total de la materia al cabo de miles de años, de modo que basta con utilizar mejor los ecosistemas para seguir creciendo todavía un cierto tiempo. Kenneth Ewart Boulding también estaba de este lado, él se basaba en la idea del reciclaje ilimitado, estimando que el aumento de entropía del proceso económico se puede retrasar mediante el uso de las energías renovables, la nuclear y el progreso técnico en la producción, el almacenaje y la distribución.
   Por tanto: Surgen los primeros objetores de crecimiento, que ven en la teoría de Georgescu-Roegen la base científica de su crítica al crecimiento económico, adoptándolo como padre fundador del futuro movimiento del decrecimiento.
   Por otro lado, encontramos a un ecologismo tecnocrático y conciliador con el capitalismo, que confía en que la transición a las energías renovables, la eficiencia energética y las soluciones tecnológicas bastarán para no agotar los recursos naturales.

   Sin embargo, será el segundo enfoque el que, gracias a su capacidad de organización en partidos políticos y en poderosas organizaciones de defensa de la naturaleza, abandere la causa ecologista, que triunfará especialmente en los años noventa bajo el concepto de desarrollo sostenible. De esta forma es como los partidarios del decrecimiento, desorganizados y sin la ambición política necesaria, caerían durante más de 25 años en el "olvido".  

   Es el desarrollo sostenible, el green business, el capitalismo pintado de verde, el que se hace hegemónico en el final del siglo XX.




SEGUNDA ETAPA DEL DECRECIMIENTO

   Hoy en día se tiende a renacer el Decrecimiento. Los partidarios han aprendido a organizarse y a transmitir sus ideas claramente. Quiero decir, a cohesionar una corriente de pensamiento social, política, económica y filosófica, que cobra cada vez mayor sentido y actualidad en esta situación de crisis económica y ecológica global.
   Por tanto, si tuviéramos que situar esta segunda etapa del movimiento decrecentista lo haríamos en febrero de 2002, en Francia. Es cuando se publica en la revista francesa "S!LENCE" un número especial sobre el decrecimiento, y el día 23 comienza un coloquio fundador que tiene lugar en el Palacio de la UNESCO de París. En este coloquio se abordan los diferentes aspectos del desarrollo y se crea la red de Objetores de Crecimiento para el Post-Desarrollo. Nace oficialmente el movimiento que hoy conocemos como decrecimiento.




LA SOCIEDAD Y EL DECRECIMIENTO


A nivel Microeconómico:
   Los publicistas saben que las personas felices son pésimos consumidores. Es decir, consumen poco. Tomando el contrapié de esta afirmación, la sociedad del decrecimiento se propone llevar a la humanidad por medio de la autolimitación a la hora de comprar peoductos, hacia una mayor felicidad y experimentar la abundancia frugal.        Esto significa que experimentaremos la moderación.

   La pobreza reside de hecho, en una pérdida de la autonomía y adicción al consumismo. "Ser dependiente es ser pobres, ser independientes significa aceptar no enriquecerse."
 El actual aumento del uso de los recursos parece incrementar los costes ambientales naturales más rápidamente que los beneficios , lo que nos hace más pobres y no ricos.
Somos una sociedad de abundancia basada en la que Ivan Illich llamaba la Subsistencia Moderna.
   De hecho, el decrecimiento intenta vincularse a esta concepción del socialismo. La abundancia frugal pretende salir de la sociedad de consumo.    Sin embargo, en el contexto actual dedepresión represiva, conlleva a un objetivo a corto plazo frente a las ideas keynesianas o neoliberales.  

A nivel macroeconómico:
   Somos una sociedad de abundancia basada en la que Ivan Illich llamaba la Subsistencia Moderna.
   De hecho, el decrecimiento intenta vincularse a esta concepción del socialismo. La abundancia frugal pretende salir de la sociedad de consumo. Sin embargo, en el contexto actual dedepresión represiva, conlleva a un objetivo a corto plazo frente a las ideas keynesianas o neoliberales.  
   Según el libro "La sociedad de la abundancia frugal" de Serge Latouche, hoy en día los impuestos ya no se utilizan para financiar el funcionamineto del Estado; sino que sirve para "engordar" z los bancos, los fondos de pensiones, empresas aseguradoras, fondos especulativos etc...
   Y cuando el crecimiento "no existe" en una sociedad de crecimiento sin crecimiento (más o menos como está ahora), el estado tiene las manos atadas, esto quiere decir que depende de sus acreedores, Los mercados financieros imponen una política de austeridad drástica salarial, de destrucción de los servicios públicos y de la privatización. Ésto provoca que se corrija el riesgo de deflación, evitando entrar en un círculo vicioso de la depresión en espiral. Y, precisamente para evitar esto, se debe salir de la sociedad de crecimiento y construir una de decrecimiento.


¿Por qué no se puede dejar en manos de los políticos?


El economista Herman Daley, discípulo de Nicholas Gerogescu-Roegen intentó modelar en 1980 una economía sin crecimiento pero incluyendo un desarrollo revisado y corregido. Llamado "Desarrollo Sostenible" 
Hoy en día esta expresión se utiliza como un sinónimo de "Crecimiento sostenible". Éste concepto conducirá a los responsables políticos en materia de medio ambiente y desarrollo de un callejón sin salida. 
No se puede crecer indefinidamente y las políticas basadas en el crecimiento sostenible no son realistas , y son incluso peligrosas.
Herman Daly dice que el desarrollo sostenible es igual que un crecimiento cero. Y bueno, cada día se nota el impacto tan negativo de la economía en el ecosistema lo que demuestra que incluso el ritmo actual no puede durar mucho más tiempo.

EL DECRECIMIENTO:

   El decrecimiento, por lo tanto, es una corriente de pensamiento que preconiza la disminución regular y controlada de la producción, con la finalidad de establecer una nueva relación de equilibrio entre los seres humanos y la naturaleza.

   LOS DEBATES PÚBLICOS SOBRE LA RELACIÓN ENTRE DECRECIMIENTO Y DESARROLLO SOSTENIBLE: 
   Existe una postura que dice que no debe relacionarse la teoría del decrecimiento con el concepto de desarrollo sostenible puesto que, dadas las limitaciones de los recursos de la Tierra, sería insostenible que todas las naciones del mundo trataran de alcanzar el nivel de consumo occidental. En cuanto a equidad...  Se calcula que actualmente el 20% de la población del planeta acapara el 85% de los recursos naturales.
   Los decrecentistas, por lo tanto, parten de la convicción de que no se trata de incrementar hasta homogeneizar el nivel de consumo de los distintos países, sino de aplicar criterios de frugalidad y reducción de la producción y el procesamiento de los recursos. 
   En cuanto no consideramos necesaria esta relación, la necesidad de denunciar la impostura del desarrollo sostenible es históricamente el origen del movimiento del decrecimiento.

   El economista francés, antes mencionado, Serge Latouche, definió los siguientes criterios básicos de la teoría del decrecimiento: Establece "El círculo virtuoso de las ocho erres"
   Así que están en contra de la obsolescencia programada, la vida tan limitada de los productos, hace que nuevos productos estén en demanda constantemente. Por lo tanto consumimos más en menos tiempo.

   Puede resumirse el decrecimiento como “vivir mejor con menos”, pero los detractores de la teoría argumentan que el crecimiento económico genera empleo, mejora la educación y la salud pública y proporciona, en definitiva, mejor calidad de vida.
Un ejemplo es Corea del Norte.
   En Corea del Norte, en cuanto a estilo de vida, es un país muy tradicional, viven como exactamente hace unos 40 años.
   No tienen la necesidad de cambiar todo el tiempo de ropa según las temporadas (su vestimenta tradicional es de buena factura y cmple bien su propósito), o cambiar los electrodomésticos frecuentemente. Poseen no más que los coches necesarios, ya que los habitantes encuentran otros medios de transportes.
  A pesar de todo, las personas tienen sus necesidades básicas bien cubiertas, y mejor aún, no consumen más recursos de los que necesitan, ni siquiera la luz en la noche.
   ¿Acaso somos nosotros, más felices que ellos por nuestro estilo de vida?


   El origen de este movimiento da lugar a más movimientos, también existen asociaciones que lo emprenden y divulgan. Un gran ejemplo es la rede que existe en Galicia:

Rede de Decrecemento Eo-Navia I Galiza I O Bierzo
   Esta rede acaba de poner en marcha el I Congreso de Decrecimento en el que podrá participar cualquier persona que así lo desee. Se intenta caminar hacia otro modelo social con otros valores, donde los problemas se resuelvan con cooperación y ayuda mútua y no con individualismo. Según los documentos base del Congreso da Rede, las personas tienen que cambiar su escala de valores y poner en el centro de las relaciones las necesidades para el mantenimiento, dejando de lado los aspectos materiales innecesarios, que además están poniendo en peligro la supervivencia de la humanidad.
   Según la Rede, las injusticias norte-sur, el sometimiento de las mujeres por el modelo hetero-patriarcal, el cambio climático, la crisis energética mundial, la superpoblación del planeta, o el desempleo, el hambre, la extinción masiva de ecosistemas y especies, y otros muchos problemas no tienen solución con la mentalidad crecentista nacida con la revolución industrial. Es preciso aceptar los límites físicos del planeta y ajustar las actividades y modo de vida a esta realidad.
   Pretenden dotar a la bio-rexión conformada por la sociedad gallega y los territorios limítrofes del Eo-Navia y O Bierzo de una organización no partidaria que divulgue y defienda la teoría del decrecimiento.

Los movimientos ecologistas Europeos:
   Una característica de los movimientos ecologistas en Europa es su gran variedad ideológica, lo cual se considera como una de sus fortalezas, aunque es algo subjetivo, pues podría ser una de las sensibilidad maltusiana, que asume que los recursos naturales, como por ejemplo, los recursos energéticos, son fijos, constantes y limitados, concluyendo con ello que el crecimiento económico es intrínsecamente negativo, pues consume unos recursos limitados que se irán agotando con el tiempo, creando una crisis global.
debilidades. Un número considerable de ellos muestra una
Estos movimientos han sido muy influenciados por Paul Ehrlich, el fundador del ecologismo conservador.

¿QUÉ ES Y QUÉ NO ES EL DECRECIMIENTO?

¿El decrecimiento es tecnofobo?
   Sergio Latouche no pretende regresar a la época de las cabernas, sino más bien en reedescubrir la satisfacción en los productos que ya existen, o en los bienes necesarios.
   Si implicaría quizás que fuésemos como la gente hace 40 años. Acostumbrada a que su tecnología aguante tres décadas, como el caso de Corea del Norte que expliqué anteriormente.

   Los propios medios de comunicación difunden la idea de que el decrecimiento está contrala ciencia, por tanto es "tecnofobo"
Gandhi muestra que cada progreso alcanzado implica una agravación de las condiciones de vida, y que la civilización occidental deja de lado la moralidad y la religión, y que crea nuevas necesidades relacionadas con el dinero imposibles de satisfacer y que aumenta por lo tanto las desigualdades. Ghandi fue un gran  precursor del crecimiento y dijo: "Yo no soy antimáquina, sino contra el frenesí por la máquina"
Es posible y deseable que se desarrollen técnicas como en la ecología. Es decir, una curiosidad desinteresada por aprender, y no dominada por la voluntad  de explotar y socavar la naturaleza.
La fe ciega en la ciencia y la tecnología  hace olvidar que los problemas son generados por un sistema social que la técnica no puede resolver.


¿El decrecimiento es machista?
El capitalismo, la economía y la ilusión del crecimiento infinito son patricentrados, falocráticos, sexistas y francamente machistas, tal y como lo han demostrado Erich Fromm, Wilhelm Reich y muchos otros.
El que cultiva patatas en su huerto sí que contribuye al PIB de un país, y no la que las cuece en su cocina. La producción de valor, observa Anselm Jappe, está asociada a "valores" varoniles; mientras que las actividades no comerciales se asocian a "valores" femeninos. Según la feminista Roswitha Scholz.
De momento, la última palabra la tiene Jean-Paul Besset:
"No es el odio al progreso el que hay que incentivar, como lo hicieron todas las corrientes reaccionarias de la historia, sino su crítica intransigente."
El decrecimiento pide un cambio ético al pensamiento de la sociedad moderna de la preocupación por uno mismo. Pues este cambio requiere conciliar las necesidades de cada uno con las de los demás,equilibrando la competencia con la cooperación.



¿El decrecimiento lleva al desempleo?
Desde el fin del boom después de la guerra, el desempleo se volvió la pesadilla de las sociedades industriales y el crecimiento lento no basta para frenarlo.
Disminuir las horas de trabajo de todos los empleados es necesario para salir de esta sociedad "productivista" a su mismo tiempo, garantiza un trabajo satisfactorio con vistas a la reducción necesaria de 2/3 del consumo de los recursos naturales para Francia por ejemplo. Para que esto sea eficiente es masiva la reducción del periodo de trabajo. El fracaso de las 35 horas en Francia, a pesar del hecho más que demostrado de la creación de empleo , muestra hasta que punto es compatible esta medida con el sistema capitalista dominante.
Cuestionar la centralidad del trabajo en nuestra sociedad equivale a minar las bases de la economía del crecimiento.
El sector agrícola en particular, es preocupante la situación. Se tienen que crear empleos pero sin aumentar la producción; pues la productividad artificial se adquiere mayoritariamente a través de tecnologías que degraden el medioambiente.
Según un estudio realizado por la Federación Nacional de los agricultores orgánicos, se podrían crear más de 90,000 puestos de trabajo en Francia. Pasaríamos del 2% actual de tasa de la agricultura ecológica al 9%, como en Austria.
Otro tema a tocar es el petróleo. El fin del petróleo barato debería crear muchos empleos. La energía fósil reina en la maquinaria, facilitando la sustitución del capital al trabajo.
El resultado de esta desindutrialización, da a ver que se puede producir de otra manera.
Por lo tanto:
  1. Disminución de la productividad teórica general 
  2. Reubicación de actividades y el fin de la explotación del sur. 
  3. Creación de empleos con contenido ecológico en todas las industrias.
  4. Cambio de estilo de vida y eliminación de necesidades inútiles.
Cambiando de vida se resolverá el problema de desempleo, mientras que centrándonos en el desempleo únicamente, sin reflexión sobre su naturaleza; corremos el riesgo de no cambiar nunca de sociedad, hasta el colapso final.


El ecosocialismo es decrecimiento:
Salir del desarrollo de la economía y del crecimiento no implica renunciar a las constituciones,sino mas bien reimplantarlas a partir de otra lógica distinta.
La salida de la economía significa renunciar al concepto de la ciencia económica como disciplina independiente y formalizada. Por lo tanto el decrecimiento se puede considerar un ecosiocialismo, si como socialismo entendemos,lo que definió André Gorz:
"La respuesta positiva a la desintegración de los lazos sociales bajo el efecto de las relaciones comerciales y de la competencia, , características del capitalismo."


¿El decrecimiento es de izquierdas o de derechas?
El decrecimiento es un proyecto político de izquierda. Para la mayoría de los objetores del crecimiento es una clara evidencia. Aunque también existe  una versión de derechas...
Este proyecto esta basado en una crítica radical del liberalismo, pues cuestiona el capitalismo desde la más estricta ortodoxia marxista.
Según la politóloga Marie-Dominique Perrot:


¿Hasta que punto, concretamente, es necesario reducir nuestro consumo de los recursos naturales?
¿Por qué no reclamar el "progreso" de la belleza de ciudades y paisajes, o el "progreso" de la pureza de los acuíferos que nos abastecen, de la transparencia de los ríos y la salud de los océanos?
Por qué no exigir una mejora del aire que respiramos y el sabor de los alimentos que comemos...
Muchos perfeccionamientos siguen siendo necesarios para luchar contra la invasión del ruido, para preservar la fauna y la flora,para aumentar nuestras zonas verdes. Para salvar el patrimonio natural y cultural de la humanidad, sin olvidar los avances de la democracia.

Es posible que la gente, como seres influenciables que somos, nos dejemos manipular demasiado por los medios de comunicación, la publicidad, la propaganda... pero sobre todo, intoxicados por nuestro consumo excesivo, nos neguemos a seguir el camino que este libro bien titulado, La sociedad de la abundancia frugal, nos intenta guiar.
Incluso este comportamiento sería bastante natural en una posdemocracia.

Sin embargo, un estudio realizado en agosto de 2004 para National Geographic muestra que Francia, sin previa campaña de concienciación y sensibilización, señala que:
  • El 58% de los franceses creen que deben actuar responsablemente día a día. 
  • El 75% está comprometido a no dejar sus electrodomésticos encendidos 
  • El 62% a conducir en una autopista a 120km/h
  • El 47% a no utilizar el aire acondicionado
  • El 44% a utilizar exclusivamente en transporte público
  • El 45% a comprar un coche limpio de emisiones, eléctrico o híbrido
  • Y el 43% a instalar calefacción solar. 
Y muchos otros sondeos realizados en otros países daron datos similares.
Obviamente unas cosas son las declaraciones y otras los actos. Pero que la mente crea en que sí se puede ir cambiando la sociedad, es un gran paso. Porque el que cree es porque quiere y el que quiere es porque cree. Poco a poco se ve como este tipo de punto de vista empiezan a quererlo, creerán y lo harán.

Bibliografía